sábado, 21 de diciembre de 2013

El nuevo sentido de la Navidad

La Navidad siempre ha sido una época especial del año.. Todo se transforma, las calles se iluminan, suenan villancicos, adornamos nuestras casas, cocinamos, compramos, nos reunimos con familia y amigos y, como no, comemos, comemos y volvemos a comer. También, como los peces en el río, bebemos un poquito.... En una palabra CELEBRAMOS!

Yo siempre oigo decir que la Navidad es más bonita cuando hay niños pequeños que viven con ilusión su magia. Sin  embargo, para mi, este año, la Navidad cobra una significado nuevo, una dimensión mayor, una ilusión más grande que nunca.. SI, porque ahora, la Navidad me trae un regalo especial. Me devuelve a mis dos hijos, me llena de nuevo el nido y, mientras disfrutamos de estos días todos juntos, es como si nunca se hubieran ido, como si aún fueran pequeños... Como sí pudiesen ser, por siempre, míos, míos... míos!

sábado, 30 de noviembre de 2013

Quijote

Le llamaban Quijote. No porque fuese alto y delgado, que lo era, sino porque se afanaba en salvar el mundo, ingenuo y soñador, luchando contra molinos de viento. Deambulaba por las calles ofreciendo a los "sintecho", bultos sin nombre, café caliente y palabras cálidas. Cuando volvía a su casa y se envolvía en su edredón de plumas y sus sábanas limpias, se sentía culpable por traicionar a aquellos a los que dejaba atrás, tiritando en los portales, en los cajeros, en los bancos de las calles, noche tras noche..

Su hermano era diferente a él. No era mejor ni peor, simplemente, ocupaba el lugar que la vida le había repartido en suerte. Sabía disfrutar la vida. Le gustaba la ropa cara y la buena mesa. Se codeaba con lo mejor de la sociedad madrileña y le gustaba  salir a disfrutar de los lugares "in" de la gran ciudad. A veces, se cruzaban en la noche, su hermano de la mano de alguna rubia "pija", él cargando una bolsa con termos y sandwiches. Fingían no verse o, a veces, se dirigían una mirada rápida de reconocimiento mutuo... sin rencores, sin reproches.

Quijote aprendió a las malas que no todo el mundo quiere ser salvado. Una de tantas noches, recibió una puñalada en mal sitio. Tardaron casi media hora en encontrarlo tendido en un gran charco rojo. En sus últimos minutos, oyó el susurro desesperado de su hermano -¡Luis, no te vayas! Aún queda mucho por hacer.. Vuelve, lo haremos juntos. Yo iré contigo la próxima vez y ya no tendrán hambre, ni frío. No te vayas, por favor, no te vayas"... Sonrió,  pero ya no pudo articular palabra. "Oh Sancho, tenías razón.. los molinos no eran gigantes y el mundo no necesitaba otro caballero andante, tal vez las cosas eran lo que eran,  y  haya sido una locura querer cambiarlas".

"Viví loco y morí cuerdo"..  Un último suspiro, un último pensamiento.





miércoles, 27 de noviembre de 2013

100% PERSONA

Con la llegada de las fiestas navideñas, leer etiquetas de todos esos artículos que miraremos hasta encontrar el regalo perfecto se va a convertir en una acción repetida, hasta el hastío, por la mayoría de nosotros. Algo que no es de extrañar ya que las  etiquetas pueden ser muy útiles para los objetos, porque nos dan información muy valiosa sobre aquello que estamos pensando comprar: composición, precio, ingredientes y un largo etcétera de datos que nos pueden resultar muy útiles.

A los seres humanos, nos gusta poner etiquetas a todo y, como no, nos gusta etiquetarnos a nosotros mismos y mutuamente, porque así es más fácil "distinguir" a cada cual y "saber" de que està hecho cada uno de nosotros. Lo hago yo, lo haces tú, lamentablemente, lo hacemos todos. Lo malo es que, en nuestro afán de etiquetar todo y a todos, muchas veces nos encerramos, nos encasillamos a nosotros mismos y a las personas de nuestro entorno dentro de un rol o de una posición que no nos define en nuestra totalidad, en nuestra individualidad, en definitiva, en nuestra verdadera esencia. Y en esa " etiqueta", siempre faltarán datos útiles para ser aceptados y queridos por lo que verdaderamente somos, aquello que verdaderamente nos define como personas.

 Etiquetamos y, sin darnos cuenta, excluimos, discriminamos, separamos... Y esas etiquetas se convierten en estereotipos que promueven intolerancia y violencia. Tal vez, la única etiqueta válida para un ser humano sea:

                    100% PERSONA
                    100% ÚNICO
                    100%  IRREPETIBLE







miércoles, 20 de noviembre de 2013

Marea

Hace ya un tiempo dediqué una entrada a la figura del maestro. Lo hice, precisamente, porque creo que la importancia del educador en la vida de un niño es casi tan grande como la figura de un padre o una madre en su desarrollo intelectual,  en su crecimiento como ser humano y en la construcción de los valores que regirán su comportamiento en el futuro.

Por eso, por el valor tan grande que les otorgo, me permito dirigirme a algunos docentes que, enfundados en camisetas verdes, han olvidado algunas cosas que a mi me parecen importantes, esenciales diría yo, para merecer el honor de ser llamado "maestro".

El primer precepto que han olvidado algunos docentes durante la crecida de la marea verde es que cada derecho conlleva un deber.. simple no? Veamos entonces, "querido maestro". Tu exiges tu derecho a la huelga. Respetado y concedido. Ese derecho, sin embargo, exige que respetes el derecho de los alumnos a los servicios mínimos y que, por supuesto, respetes a aquellos docentes y alumnos que no creen en tu causa y quieren ejercer su derecho a trabajar o a asistir a clase, sin coacciones, sin ataques, sin represalias. Ese es SU derecho, tan importante como el tuyo.

 Exiges tu derecho a enseñar en catalán.. Me gustaría que me indicases donde viene escrito ese derecho inalienable y, de existir, en que momento ese supuesto derecho eliminó el derecho de los padres a elegir la lengua vehicular en la que estudian sus hijos. Cuando una imposición similar la hizo Franco se llamaba dictadura... ¿Cómo  llamas tu a la tuya? Esos alumnos que llenan tus clases no te pertenecen y no puedes impedir, cogiéndolos como rehenes de tu huelga, que estudien la lengua oficial del país al que pertenecen. Ese derecho NO lo tienes.

Por otra parte, cobijado por ese puesto de trabajo asegurado, que sólo disfrutáis unos pocos privilegiados en este país, utilizas un espacio público y pagado por todos para manifestar, imponer y  propagar tus ideas políticas, tu proyecto lingüístico y tu forma de pensar ante unos niños que te han sido confiados para su educación en conocimientos, no en doctrinas políticas. Tu labor es enseñar a los niños a pensar y no QUE pensar. El adoctrinamiento no es propio de regímenes democráticos.

Por último , te recuerdo que tu sueldo lo pagamos todos, incluso aquellos a los que niegas el derecho a estudiar en castellano y en inglés y que, como funcionario público, estas obligado a acatar las leyes promulgadas por gobiernos elegidos en las urnas, porque ningún ciudadano tiene el derecho a incumplir las leyes porque no le gusten o no le convengan. TU, querido docente, tampoco.

¿Quieres vestirte de verde, quieres colgar pancartas, quieres poner lazos y banderas no oficiales, quieres exigir "derechos"?  Hazlo, pero hazlo en la calle, en tu casa y en tu tiempo. Los colegios son espacios de todos y para todos. Los que piensan como tú y los que no piensan como tú,los que creen en tu proyecto y los que creen en otro diferente. Por eso te pido... LA POLÍTICA FUERA DE LOS COLEGIOS!

lunes, 28 de octubre de 2013

Los malos

Corrupción, violencia, pobreza, desahucios, intolerancia, hambre.....las noticias, los periódicos, las calles de nuestra ciudad  reflejan un mundo lleno de maldad. Es tan negro el panorama que, irremediablemente, acabamos con la moral por los suelos. Llegamos a la conclusión de que todo anda mal y que este mundo nuestro no tiene cura. Descorazonados, nos preguntamos : ¿Será verdad que están ganando "los malos?

Entonces ves un bebé precioso y tierno, que abre sus ojos maravillado ante todo lo que le rodea. Tal vez ves en la calle a una madre, cuya ropa vieja y manos estropeadas dan fe de una vida dura, regalando a su hijo la mejor de sus sonrisas. O te cruzas con una pareja de octogenarios cogidos de  la mano y charlando de pequeñas cosas que para ellos son los recuerdos de toda una vida. Y cada una de esas cosas, en su infinita pequeñez, nos confortan porque son la muestra de que  todavía hay un rinconcito para la esperanza y de que  la raza humana es un poquito más humana de lo que pensábamos.

El mundo no es algo fijo o estático. Muy al contrario, es un lugar donde cada pequeña acción, buena o mala, genera una serie de ondas que transforman todo. Efecto mariposa, creo que lo llaman. Y, aunque no está en la mano de nadie cambiar el mundo, está en la mano de todos cambiar el mundo a nuestro alrededor.

Voy a daros una buena noticia....Por cada "malo" hay muchos buenos, por cada corrupto hay muchos honestos, por cada hambriento hay muchos generosos, por cada soldado hay muchos médicos y por cada violento hay muchos tolerantes. Por eso, hay que creer que los buenos acabarán ganando, como en aquellas películas americanas de nuestra infancia, porque somos más y más listos!

                                                         

viernes, 26 de julio de 2013

EXTRAÑOS

De ahora en adelante, seremos dos extraños. Y pasarán los días arrastrando consigo minutos inútiles y tú, sin darte apenas cuenta, olvidarás la cadencia de mi voz y el sonido de mis pasos. 
De ahora en adelante, caminaremos por sendas separadas, destrenzando sueños, quimeras y momentos antaño compartidos. Y tal vez una noche, tú dejes de soñar conmigo y yo, acaso algún día, deje de pensar tu nombre. 
De ahora en adelante, mi vida dejará de ser tuya y la tuya mía. Y estas vidas, ahora ya sin dueño, las ofreceremos a otros a cambio de apenas nada. Y de lo nuestro quedará solo el eco de lo que pudo haber sido.
Si algún día la casualidad cruza nuestros destinos, fingiremos no habernos visto, tu desviando la mirada hacia un punto impreciso, yo rebuscando en el bolso la sombra de algún recuerdo. Y luego, con un suspiro contenido, seguiremos nuestro camino, repitiéndonos : “no valía la pena”, pero el corazón, que es terco, se saltará un latido.


La niña vestida de azul

La pesada tela azul caía como una losa sobre su  pequeño cuerpo. Mientras caminaba por las pedregosas calles de Kabul, mirando a través de la pequeña rejilla que era su único contacto con el mundo exterior, sintió el intenso calor y el sudor que resbalaba desde su cabeza, por su frente hasta el cuello. Supo que cuando se retirase el burka, como cada día, se le habría caído mucho pelo. Eso le daba lástima porque había heredado de su madre una hermosa cabellera negra azabache.

Tenía la certeza de que, mas allá de aquella cárcel azul el mundo tenía que ser diferente. Imaginó escuelas donde la niñas aprendían, jugaban y cantaban sin miedo, soñó con ir a una universidad donde todos la escuchaban y respetaban a pesar de ser mujer, pero, sobretodo, anheló un mundo donde Dios no fuese iracundo e inflexible, sino amable y misericordioso.

Vio un grupo de hombres que exhibían orgullosos sus turbantes y sus barbas. Gritaban y gesticulaban como si el mundo, las calles y el aire que les rodeaba fueran suyos. Se encogió instintivamente y aceleró el paso, desviando su paso para evitar que sus caminos se cruzaran.

Se prometió a si misma que un día sería libre y, que si no podía serlo, no le importaría la lluvia de piedras que, irremediablemente, caería sobre ella.


jueves, 16 de mayo de 2013

El final



Sentada en el viejo sillón, esperó a que sonara el timbre. En la pequeña maleta que tenía a sus pies, le había cabido la vida entera. No quería  pensar en nada, no quería recordar nada... solo esperar. Le dolían los huesos, tanto que moverse resultaba ya casi imposible, le dolían los dientes, los pocos que ya le quedaban, le dolían las manos, las piernas, le dolía también el alma y la soledad.. la soledad, sobretodo, le dolía mucho.

 Apenas se reconocía en la foto que colgaba de la pared. Una novia bonita y sonriente posando junto a un hombre que la quería. Miró a su alrededor, las viejas paredes descascarilladas albergaban las risas de su hijo y la voz de su marido pidiéndole la cena después de un largo día de trabajo en el puerto. Voces ya calladas hacía tantos años....

Llamaron a la puerta... los hombres de blanco ya estaban aquí. Se despidió en silencio de su vida entera y una sola lágrima rodó por su mejilla.



martes, 30 de abril de 2013

EL TIEMPO

Es curioso como, día a día, apenas nos damos cuenta de los cambios que suceden en nuestras vidas. Realmente  solo cuando, en un momento de nostalgia o que dedicamos al recuerdo, volvemos la cabeza atrás, percibimos que en realidad nada ha permanecido igual.

El tiempo que nos mueve hacía delante lo transforma todo.... nuestros rostros, nuestras circunstancias, nuestra manera de enfocar todo lo que nos rodea de una manera casi intangible. Minutos, días, horas encadenadas segundo a segundo componen al final eso que llamamos vida.

En la infancia y en la juventud el tiempo viaja siempre por delante y apenas nos volteamos a mirar hacia atrás. Actúa como una potente corriente que nos arrastra hacia adelante. A medida que maduramos, cada vez deviene mas importante lo ya vivido. Lo llamamos experiencia. En la vejez, cuando el futuro es apenas una anécdota,  la vida se convierte en el conjunto de tiempos pasados, de momentos pequeños que se han convertido en grandes recuerdos, que a los ancianos a menudo les gusta contar, una y otra vez, como si a fuerza de  repetirlos muchas veces pudieran revivirlos en todo su esplendor.

El tiempo, cada instante, es un trozo de vida...  El tiempo, ese factor tan importante y a la vez intangible, es todo sin ser nada.



  

martes, 19 de marzo de 2013

El padre

A menudo ausente, viajando o trabajando hasta tarde, participaste menos de mi infancia de lo que seguramente hubieras querido. No recuerdo haber jugado mucho contigo, ni te recuerdo sentado conmigo haciendo los deberes. Querías poder ofrecernos todo aquello que tu no tuviste, comodidad económica, una buena educación, la oportunidad de viajar y de aprender idiomas. Luchaste por prosperar, por hacer que en nosotros se cumpliesen todos los sueños incumplidos de tu infancia. A menudo, estabas ausente, si.. pero solo físicamente porque tu fuerza y tu tenacidad estaban siempre presentes, en el entorno cálido y seguro que nos brindabas. Escogiste a la mejor para cubrir tu ausencia y ella se encargó de que nunca faltara el cuidado y el afecto... y, cuando volvías a casa, siempre cargado de regalitos y sorpresas, tenerte era una fiesta!

Ahora que tengo hijos, imagino lo duro que debió ser perderte tantas cosas y el sacrificio enorme que debieron suponer las horas de trabajo sin fin que, en ocasiones, te mantenían alejado de nosotros. No vivo tus ausencias con amargura, sino todo lo contrario, con agradecimiento. Me hace pensar en que la paternidad, y la maternidad para mucha gente significan sacrificios.

Tus nietos te han dado la oportunidad de recuperar algunos de esos momentos y te he visto feliz en tu papel de abuelo. 

Has sido un ejemplo constante de generosidad, de superación y de lucha. Gracias papá! y feliz día..

                       




miércoles, 27 de febrero de 2013

EL RELEVO

Tienes hijos.. es algo normal. Los crees tuyos porque están conectados a ti, no solo genéticamente, porque tienen tus ojos o tu sonrisa, sino porque dedicas cada minuto de tus días y tus noches a su cuidado. Te preocupas por su bienestar físico, pero, si eres un buen padre, te preocupas sobretodo por la persona en que se habrán convertido cuando se corte el cordón umbilical que les une a ti.

Este fin de semana he estado con mis dos hijos mayores en Madrid. Tal vez, lo mas importante que he sacado de estos momentos compartidos con ellos es que me gustan como personas y no por el mero hecho de ser mis hijos, que eso no tiene ningún mérito. He visto a dos chicos centrados, educados, solidarios. Dos chicos que además de disfrutar de su música y de sus juergas, como todos los jóvenes, saben disfrutar del arte, de la cultura y de la buena conversación. Les he oído hablar de sus planes de futuro, de sus estudios, de sus objetivos, de sus ideales. Y ante esta madurez y, aunque siempre estaré con ellos, he sabido con certeza que ya ha comenzado su andadura en solitario. No tengo miedo.. están preparados.

Como adultos, a menudo contemplamos a los jóvenes con escepticismo.. la generación ni-ni, los que no tienen sueños, ni objetivos.. Nos asusta pensar que dejaremos el mundo en sus manos. Yo creo que muchos de esos chicos que ahora emergen, aprenderán de nuestros errores y cambiarán la manera en que gira el mundo. Tengo fe en el relevo..  Tengo fe en ELLOS.

Ver la foto.JPG en presentación

miércoles, 23 de enero de 2013

La ceguera de la Justicia

Yo siempre había creído que cuando se decía que la justicia era ciega, significaba que, ante ella, todos eramos iguales. Vamos, que la justicia no hacía diferencias entre blancos y negros, hombres y mujeres, ese tipo de rollo . ... pero resulta que no!!! Ni mucho menos!!!... Ay, inocente de mi!! Resulta que cuando vemos a la justicia con la venda ante los ojos es que literalmente no ve lo que no quiere ver. O, para ser mas exactos, ve solamente lo que quiere ver y se pone o se quita la venda según le va, dependiendo de a quien se juzga y, por supuesto, dependiendo de los intereses del juez que juzga.

..y, para mayor inri, resulta que además de ciega o tuerta, o lo que sea, la pobre Justicia es además coja (si es que, pobrecilla, lo tiene todo).. porque es mas lenta que el caballo del malo. Y digo yo.. será tan difícil que el que roba pague por su delito (y, a poder ser, devuelva lo robado), y el que se enriquece ilícitamente dé con sus huesitos en la cárcel .. porque yo estoy harta de ver a un sinvergüenza tras otro, desfilando ante nuestras narices.. con cara de no haber roto nunca un plato, pero con sus cuentas corrientes (me da igual si en Suiza o en Leganés) mas rellenas que un Ferrero Roche.

Para mi, la Justicia es el pilar de todo sistema democrático. Si no hay justicia, no hay democracia, así de claro. Y si no es rápida y contundente, no es justicia. Y dejémonos de presunciones de inocencia y de meses de investigar e investigar y volver a investigar. Blanco y en botella... será leche?

 Señores jueces, hagan su trabajo y háganlo bien, por el bien de nuestra moribunda España y por el bien de sus ciudadanos que están perdiendo la confianza y la paciencia. Gracias